En España y en China se concibe el tiempo de trabajo, la eficiencia, y la relación con la productividad de maneras diferentes.
Alejandro Zuhang, powerlifter, creador de contenido y empresario, compartió en 'Sísifo Pódcast' su perspectiva sobre las diferencias culturales y laborales entre China y España, una visión que ha generado debate. “Una hora de un trabajador chino son ocho de un trabajador español”, aseguró.
El empresario no limita sus comparaciones al ámbito estrictamente económico. También alude a la educación como base de la cultura del esfuerzo. En sus palabras, “en China la disciplina va por delante de todo lo que aprendes”. Para Zuhang, la disciplina académica en China explica en parte la disposición de los trabajadores a asumir jornadas prolongadas y a mantener la concentración en el cumplimiento de objetivos.
En lo que respecta al entorno laboral, el empresario describió los contrastes entre China y España. Subrayó la diferencia en la percepción de las horas de trabajo y la productividad. “Un español por ley trabaja 40 horas. Pero en China no hay ley. O sea, en el contrato no pone cuántas horas tienes que trabajar. Puedes trabajar 50 o puedes trabajar 20. El que termina antes se va a su casa y a lo mejor puede coger cinco días de vacaciones”, explicó el emprendedor durante la entrevista.
Según el análisis de Zuhang, la eficiencia marca una diferencia fundamental. “Son muy eficientes. Nunca verás a un chino en el trabajo que se pega su horita de descanso para tomarse una cerveza, o para fumarse cuatro cigarros. No. Un chino es capaz de tirarse, si hace falta, 14 horas seguidas trabajando para terminar todas las tareas que tiene”, describió.
Detalló que aquí se mantiene una jornada fija de ocho horas diarias de lunes a viernes, independientemente del nivel de productividad alcanzado en el día. “Hago un poco así por encima, termino unas cuentas cosas. Si no me da tiempo, lo termino mañana. Total, me quedan otras ocho horas. Pero ahí es diferente. Si lo terminas, te vas a tu casa”, comentó en el pódcast.
El sistema laboral que describe otorga cierta flexibilidad al trabajador, aunque también presenta riesgos: “Ahí a lo mejor se te lía un trabajo y puedes trabajar 60 horas semanales, y aquí son 40 fijas”.